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Intendente Arturo Molina en premiación de los Líderes del Norte
•Primera autoridad regional sostuvo que la principal riqueza de cualquier territorio es su gente, su población. Especialmente delicados hay que ser con las generaciones más jóvenes. El liderazgo no es sencillo, exige temple, ganas y ánimo; muchas veces hay incomprensión, que puede resultar fatal. Sin embargo, el líder muestra caminos y los crea cuando no los hay.
Un discurso de motivación presentó el Intendente Arturo Molina Henríquez a once jóvenes nortinos que destacaron en distintos ámbitos durante el 2017; siempre apuntando al bien común. Se trata de un trabajo conjunto realizado entre Antofagasta Minerals, SQM y El Mercurio de Antofagasta, más el apoyo de distintas organizaciones de la zona.
Es la quinta versión de una actividad entrañable para los organizadores, pues cumple con un objetivo que entendemos como prioritario. La principal riqueza de un territorio no son los recursos naturales, los edificios. Son las personas, porque son ellas las que imaginan, crean mundos y transforman la sociedad para construir bien común.
En la ocasión se premió a 11 mujeres y hombres que representan a grupos más amplios. Ellos no trabajan solos, sino que tienen redes, que hacen posible el cumplimiento de los objetivos. Destacan en la ciencia, el arte y la cultura, la salud, el deporte, el trabajo social, la seguridad, el emprendimiento, entre otros, siempre pensando que su labor ayuda a otros.
Y esto se hace con pasión, con ganas, con compromiso, sentido de urgencia y la certeza de que ningún esfuerzo es en vano.
Antofagasta, nuestra ciudad y región, está lleno de estos ejemplos. Son miles los niños y jóvenes que trabajan duro por construir un mejor territorio, que nos regalan su esfuerzo y con sus manifestaciones y acciones, generan climas y muestran caminos. Tienen temple y fortaleza para salir adelante, soportar las críticas, lidiar con las dificultades muchas veces lo hacen en soledad, mientras otros solo observan desde cómodas posiciones.
Molina Henríquez valoró los ejemplos de superación y llamó a cuidarlos y promoverlos, admirarlos y exigirles, apoyarlos y recordarles que son las personas las que hacen los cambios.