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Viernes 13 de agosto de 2021

Jorge Orellana: “El servidor público busca el bien común de las personas y no el bien personal. Esto hay que tenerlo claro para lograr una gestión eficiente”

El jefe de la División de Administración y Finanzas (DAF) comentó de su experiencia como ingeniero en administración de empresas y magíster en administración pública, con más de 30 años trabajando en el sector público. Durante su trayectoria ha destacado su labor en diversas secretarias regionales, ministerio público, Subdere y en la municipalidad de Taltal. Su rol en el Gobierno Regional lo toma como un gran desafío, principalmente, porque es una de las divisiones más antiguas del Gore, y por lo mismo, “es una unidad que debe ser renovada bajo el marco de la transparencia y probidad”, recalcó Orellana.

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¿Cuál es la labor de la división de Administración y Finanzas al interior del Gobierno Regional?
La división trabaja, específicamente, en la administración de los recursos físicos, financieros, humanos y tecnológicos de todo el gobierno regional. Además administramos el programa 01 que se llama de "funcionamiento", trabajando muy ligado con la división de Desarrollo Regional e Inversión que ve el control del FNDR. Por lo tanto, somos una unidad estratégica porque sostiene la función administrativa y financiera del Gore.
En términos generales, la DAF es una división de servicios para los usuarios internos y externos. Los internos son todos los funcionarios y funcionarias del gobierno regional, que de acuerdo a una estimación legal, suman 117.

¿Cuál es la proyección de la división que hoy le toca dirigir?
Nosotros tenemos una desafiante responsabilidad, y es la instalar esta nueva estructura institucional que son los gobiernos regionales a través de todo el país, esto incluye, a las respectivas divisiones. En este contexto, el desafío que tenemos asumido es el de generar todas las condiciones necesarias para que el gobernador regional y su equipo se instalen como corresponde. Obviamente bajo los lineamientos que la autoridad nos ha encomendado, como por ejemplo, la eficiencia en el gasto, probidad y el buen trato.

Durante el proceso de instalación han enfrentado una serie de dificultades. ¿Qué puede decir al respecto?
El proceso de instalación no ha sido fácil porque tuvimos que ingresar a una infraestructura física que no teníamos como gobierno regional, entonces, entramos a este edificio junto a la delegación presidencial. En este minuto estamos funcionando en dos pisos en condiciones que no son las mejores, pero, estamos abordando este tema sabiendo que hay que seguir adelante porque el gobierno no se puede detener por esta dificultad. Sin renunciar a que a corto plazo podamos contar con nueva infraestructura física.
Por otra parte, nos tuvimos que instalar con un presupuesto aprobado y acotado el 2021 y con un presupuesto 2022 casi en un 80% ya resuelto. Estamos trabajando prácticamente con estructuras presupuestarias definidas, eso a nosotros no nos permite tener la flexibilidad que necesitamos para instalarnos como quisiéramos.

¿Cuáles son las metas u objetivos que buscan materializar en estos cuatros años de gestión?
Primero que todo, instalar una política del buen trato hacia nuestros funcionarios y funcionarias, que los recursos sean utilizados como corresponde y que todos tengan claro que somos servidores públicos, por lo que, nada de lo que hay es propio o personal. Es decir, desde los equipos de informática hasta los escritorios le pertenecen a todos los chilenos, por lo tanto, debemos darle un buen uso con probidad y transparencia.
Al mismo tiempo, vamos a introducir innovación porque nuestro gobernador, dentro de su visión, tiene muy incorporado el concepto en todos los aspectos de la gestión pública. Queremos trabajar con un sentido de innovación para dejar de hacer lo mismo siempre, sólo por seguridad o estabilidad. Trabajar en el servicio público es muy distinto que trabajar en el mundo privado, porque aquí lo que se busca, es el bien común de las personas y no el bien personal.